“en la cresta de la ola”: expresión usada usualmente por individuos de cabello aclarado por el sol que habitualmente suelen estar mucho tiempo dentro del agua esperando que la llegada de una ola empleando la energía cinética de la misma para impulsarse a una velocidad varias veces superior a la habitual. De esta manera se produce la liberación de gran cantidad de endorfinas, y dependiendo de la energía cinética y la energía potencial alcanzada, también adrenalina.
La verdad que es una manera muy complicada de decir que: ESTAS EN TU MEJOR MOMENTO, EN EL AQUÍ Y AHORA QUE HACEN QUE DISFRUTES CADA MINUTO COMO SI FUERA EL UNICO.
Y pensándolo bien, es así. Cada minuto de tu vida es irrepetible, las condiciones, las circunstancias y sobre todo vos, van a ser distintos.
Repensemos esto, ¿cuanto mas se disfruta aquello que nos requirió una espera; una preparación para ese momento?
La espera de la ola perfecta, para después correrla, montarla para que luego desaparezca lentamente en una rompiente como un montón de espuma; o un buen vino que requiere un periodo de estacionamiento, y un paladar entrenado para apreciar sus matices. Ambas se esperan, se eligen, y después; después desaparecen.
¿Es asi?¿ no queda nada?¿desaparece?
¿No atesoramos todos esos momentos?, no necesariamente son recuerdos, tal vez son sensaciones, emociones y algunas veces hasta sentimientos; pero están ahí.
Una buena vida requiere de un periodo de maduración también y esa compañía adecuada la que nos permite apreciarla en toda su plenitud… Atesorando.
Salud.
La verdad que es una manera muy complicada de decir que: ESTAS EN TU MEJOR MOMENTO, EN EL AQUÍ Y AHORA QUE HACEN QUE DISFRUTES CADA MINUTO COMO SI FUERA EL UNICO.
Y pensándolo bien, es así. Cada minuto de tu vida es irrepetible, las condiciones, las circunstancias y sobre todo vos, van a ser distintos.
Repensemos esto, ¿cuanto mas se disfruta aquello que nos requirió una espera; una preparación para ese momento?
La espera de la ola perfecta, para después correrla, montarla para que luego desaparezca lentamente en una rompiente como un montón de espuma; o un buen vino que requiere un periodo de estacionamiento, y un paladar entrenado para apreciar sus matices. Ambas se esperan, se eligen, y después; después desaparecen.
¿Es asi?¿ no queda nada?¿desaparece?
¿No atesoramos todos esos momentos?, no necesariamente son recuerdos, tal vez son sensaciones, emociones y algunas veces hasta sentimientos; pero están ahí.
Una buena vida requiere de un periodo de maduración también y esa compañía adecuada la que nos permite apreciarla en toda su plenitud… Atesorando.Salud.
Comentarios
Hay que aprender a disfrutar de cada minuto de alegría o tristeza, de buena o mala racha, de suerte o desgracia... porque en definitiva todo pasa...
(Igual yo sigo en etapa de aprendizaje!)
Salud.